La compañía de telefonía Vodafone
ha recurrido al humor en su última campaña publicitaria para anunciar el
servicio gratuito Spotify Premium destinado a un determinado grupo de clientes. El
spot ha sido realizado por la agencia madrileña Sra. Rushmore.
Bajo el título “Millones de
canciones para sacarte esa de la cabeza” Vodafone nos presenta a un hombre
que tararea insistentemente y en diversas situaciones la canción “La
Mayonesa”, el pegadizo tema de la banda uruguaya Chocolate, que se
convirtió en éxito del verano en el año 2000.
Al protagonista del spot se le ha
quedado grabada la melodía y no puede evitar tararearla, no importa donde se
encuentre ni delante de quien esté, algo que sin duda resulta gracioso en determinadas
situaciones. Definitivamente gracias a
Vodafone y su nuevo servicio Spotify consigue sacarse esa canción de la cabeza.
Si nos paramos a pensar, seguro
que en más de una ocasión nos ha sucedido algo parecido. Se nos ha instalado una melodía en el cerebro, que repetimos
constantemente y parece que no se vaya a ir ni con agua
caliente. Pero, ¿sabemos algo de este
comportamiento?
La música y nuestro cerebro
Lo cierto es que conocemos muy
poco sobre lo que hay detrás de este fenómeno que curiosamente los ingleses
llaman “earworm”, es decir “gusano del oído”, porque la canción actúa como si
un gusano estuviera continuamente taladrándonos el oído.
Actualmente sabemos que la música
es capaz de activar al mismo tiempo diferentes áreas de nuestro cerebro, por ejemplo el área encargada de interpretar el
lenguaje o las regiones relacionadas con las emociones. Realmente la música
despierta casi todo nuestro cerebro, contribuye a estimularlo protegiéndonos
frente al deterioro cognitivo progresivo.
Estudios realizados por
investigadores del Departamento de Psicología y Ciencia del Cerebro, de
Dartmouth, en Estados Unidos, encontraron que un área de la corteza auditiva permanece
activa cuando una persona ha escuchado una melodía pegadiza y sigue
repitiéndose en su cabeza, a pesar de que la música haya dejado de sonar hace
tiempo.
Otros estudios llevados a cabo
por científicos de la Universidad de Washington señalan que cuanto más música
escuche un individuo más probabilidad tiene de que una determinada melodía se “pegue” en su cerebro.
También apuntan que escuchar una
palabra que forme parte de la letra de una canción, puede traer esa pieza
musical a la cabeza. Además señalan que si una persona continua cantando una
determinada canción cuando la música ya ha cesado, las probabilidades de que
esa melodía regrese al cerebro aumentan de forma importante.
Lo cierto es que investigar más
profundamente porqué se produce este comportamiento además de servir a los
publicistas para diseñar campañas con jingles pegadizos para que tengamos
siempre presente el producto anunciado, resultaría tremendamente útil a
neurólogos, psicólogos y psiquiatras para conocer el mecanismo que activa de
forma recurrente pensamientos no deseados o intrusivos y descubrir cómo
minorizarlos, algo que resultaría especialmente beneficioso para las personas
afectadas de TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo).
Escuchar música es una actividad
llena de beneficios: disminuye la ansiedad y el dolor, fomenta la creatividad y contribuye a la liberación de las llamadas hormonas de la felicidad. Así que
regálale a tus oídos un poco de música cada día.